Contraindicaciones
SALOFALK Enemas no debe usarse en caso de: hipersensibilidad existente al ácido salicílico, a sus derivados o a cualquier otro de los componentes; trastornos graves de la función hepática y renal; úlceras existentes del estómago y del duodeno (ulcus gástrico, ulcus duodenal); tendencia patológicamente elevada a hemorragias (diátesis hemorrágica). SALOFALK Enemas no se debería emplear para el tratamiento de lactantes y niños pequeños, debido a que no se dispone de experiencias suficientes para este grupo de edad, ni en pacientes con hipersensibilidad a los benzoatos. Los asmáticos no deben ser tratados con SALOFALK Enemas dado que el contenido de sulfitos en los enemas puede causar reacciones de hipersensibilidad.
Precauciones
SALOFALK Enemas se debería emplear bajo control médico. Se debería examinar, a criterio del médico tratante, el estado de la sangre y de la orina antes y durante el tratamiento. Como norma se recomiendan controles 14 días después de comenzado el tratamiento, luego 2 a 3 veces más con intervalos de 4 semanas. En caso de resultado normal se exigen análisis de control trimestrales, pero se realizarán inmediatamente si se presentan síntomas patológicos adicionales. Para el examen de la función renal se recomienda la determinación de la urea (nitrógeno ureico) y de la creatinina en el suero, así como un análisis del sedimento urinario. Se debería prestar atención a valores elevados de metahemoglobina. Si existe trastorno de la función pulmonar, sobre todo asma bronquial, está indicada una vigilancia especialmente esmerada durante el tratamiento con mesalazina. En pacientes con conocida hipersensibilidad frente a preparados que contienen sulfasalazina, se debería iniciar el tratamiento con SALOFALK Enemas sólo bajo cuidadoso control médico. El tratamiento debe ser inmediatamente interrumpido si se presentan fenómenos de intolerancia aguda, tales como por ej. espasmos, dolores abdominales agudos, fiebre, dolores de cabeza graves y exantemas cutáneos.