CORODEX

1597 | Laboratorio CELSIUS

Descripción

Principio Activo: Dexametasona,
Acción Terapéutica: Antiasmáticos y broncodilatadores

Composición

CORODEX Comprimidos: cada comprimido: dexametasona 1mg. CORODEX 8 comprimidos: cada comprimido: dexametasona 8mg. CORODEX 20 Comprimidos: cada comprimido: dexametasona 20mg. CORODEX Gotas: cada ml de solución: dexametasona (como 21 fosfato disódico) 1mg. CORODEX Inyectable: cada ampolla de 1ml: dexametasona (como fosfato disódico) 4mg.

Presentación

CORODEX Comprimidos: estuche conteniendo 30 comprimidos. CORODEX 8 comprimidos: estuche conteniendo 10 comprimidos. CORODEX 20 Comprimidos: estuche conteniendo 10 comprimidos. CORODEX Inyectable: estuche conteniendo 5 ampollas de 1ml. CORODEX Gotas: frasco conteniendo 30ml de solución.

Indicaciones

CORODEX se utiliza, a dosis fisiológicas, como terapia de sustitución hormonal; a dosis farmacológicas, como antiinflamatorio, como inmunosupresor, como antianémico durante quimioterapia, como tratamiento de shock y en procedimientos diagnósticos.

Dosificación

La dosis, tiempo de utilización y vías de administración son muy variables, dada la diversidad de situaciones clínicas, de respuesta terapéutica y de tolerabilidad. En general, se recomienda el uso de las menores dosis efectivas, alcanzadas progresivamente; la utilización durante el menor tiempo posible y la aplicación local. Sin embargo, en situaciones de emergencia y otras situaciones clínicas especiales, puede ser necesario el uso de dosis altas o durante períodos prolongados (incluso de por vida, en estados de insuficiencia suprarrenal) o las vías sistémicas (orales o parenterales). En general, en el adulto el tratamiento con CORODEX se realiza con una sola administración diaria, en las primeras horas de la mañana, para lograr la mínima inhibición del eje hipotálamo-hipófiso-adrenal. Por ser un corticoide de acción prolongada, la administración en días alternos no tiene ventajas sobre la administración diaria, y no se recomienda. Las dosis orales se ingerirán preferiblemente con alimentos. Las inyecciones intramusculares se administrarán en la región glútea profunda, cambiando de lugar cuando deben repetirse. Conviene evitar las inyecciones en el deltoides, por la mayor frecuencia de atrofia local. Las inyecciones intraarticulares no deben repetirse con frecuencia mayor a una cada tres semanas. Después de su aplicación en articulaciones que soportan peso, es conveniente el reposo de las mismas por 24-48 horas. La desaparición del dolor que muchas veces se logra con la inyección intraarticular, no debe inducir al paciente a sobreexigir la articulación. Los comprimidos de CORODEX de 1 y 8mg permiten la adecuada posología oral en la mayoría de las situaciones clínicas. Los de máxima concentración (20mg) facilitan la administración de las grandes dosis de dexametasona que se requieren en los siguientes casos: púrpura trombótico trombocitopénico (20 a 120mg/día); edema cerebral sucundario a tumores intracraneanos (30-60mg/día); púrpura trombocitopénica inmune (40mg/día); anemia hemolítica autoinmune (20mg/día); casos graves de colitis ulcerosa (20mg/día). Dosis pediátrica: en pediatría, CORODEX se utiliza fundamentalmente como terapéutica de urgencia, siendo su indicación más común la prevención y tratamiento del edema glótico de la laringitis aguda edematosa. La dosis recomendada es de 0,087 a 0,333mg/kg/día (promedio: 0,166mg/kg/día). Expresado en gotas de CORODEX Solución oral, ello equivale a la administración diaria de 4 gotas por kg de peso (dosis promedio) con un margen de variación de entre 2 y 8 gotas diarias por kg de peso corporal. Se recomienda fraccionar la dosis diaria total en tres o cuatro tomas. El tratamiento no debe extenderse por más de algunos días.

Contraindicaciones

A dosis fisiológicas, de sustitución, la dexametasona no tiene contraindicaciones. A dosis farmacológicas, deberá evitarse en las siguientes situaciones: en niños y adolescentes:todos los corticoides pueden inhibir el crecimiento; de ser imprescindible su uso, deberán utilizarse los de acción corta o intermedia. Sólo se puede utilizar CORODEX en situaciones de emergencia o por muy breve tiempo. En inyección intraarticular:previo a artroplastia de la articulación en cuestión, por el riesgo de favorecer procesos infecciosos; por la misma razón, si hay o hubo previamente una infección periarticular; en pacientes con trastornos de la crasis, por el riesgo de hemorragia intra o extraarticular; si existe evidencia de osteoporosis yuxtaarticular no secundaria a artritis, pues puede exacerbarse; si la articulación a tratar se considera inestable o si existe fractura intraarticular. En uso sistémico como profilaxis del síndrome de distrés respiratorio neonatal: ruptura prematura de membrana y/o amnionitis; insuficiencia placentaria; enfermedades de la gestante como sangrado uterino, infecciones (en especial tuberculosis o por virus herpes II en fase activa), queratitis (a menos de cobertura antimicrobiana).

Precauciones

Se debe recordar que los glucocorticoides determinan disminución de la resistencia a las infecciones(incluso en tratamientos breves, pero con dosis elevadas; también en el período inmediato posterior a la retirada del fármaco). No se administrarán vacunas a virus vivos sin valorar el estado inmunológico de una paciente que recibe corticoides, debido al riesgo de que la persona contraiga la enfermedad a partir de la vacuna, o de que no desarrolle adecuadamente anrticuerpos. Tener presente, además, que los glucocorticoides pueden enmascarar síntomas de los procesos infecciosos. Se debe atender al balance riesgo vs. beneficio en las siguientes situaciones: ancianos:estos pacientes tienen mayor riesgo de desarrollar hipertensión, y los de sexo femenino, además, están propensos al desarrollo de osteoporosis. Mujeres amamantando:dado el bajo porcentaje de excreción por la leche materna, las dosis fisiológicas o las dosis farmacológicas bajas de corticoides no parecen producir efectos adversos en el lactante. Sin embargo, a dosis mayores, debería considerarse la suspensión de la lactancia por la posibilidad de que aquellos aparezcan (fundamentalmente, inhibición del crecimiento y de la producción de esteroides endógenos). Infecciones virales, bacterianas o micóticas sistémicas: si no están controladas con inmunoterapia o tratamiento específico. Esta precaución es especialmente válida con relación a la varicela o el sarampión, tanto en pacientes cursando la enfermedad, convalecientes, o que han estado recientemente expuestos a contagio. El tratamiento con glucocorticoides puede favorecer una generalización de la infección, potencialmente fatal; si un paciente recibiendo CORODEX se expone a contagio, debe valorarse la posibilidad de utilizar inmunoglobulina, o si enferma de varicela, indicarle antivirales. También en los pacientes con antecedentes de tuberculosis se recomienda quimioprofilaxis por la posibilidad de una reactivación. Los pacientes con infección por VIH pueden requerir tratamiento con glucocorticoides como parte de las medidas terapéuticas, pero debe tenerse en cuenta el riesgo incrementado de candidiasis, herpes simple o infecciones oportunistas. Herpes bucal u ocular(éste puede agravarse hasta una perforación de córnea). Insuficiencia o enfermedad cardíaca, e hipertensión(posibilidad de retención hídrica, aunque la dexametasona tiene escasa actividad mineralocorticoide). Ulcera péptica(aumento del riesgo de sangrado). Litiasis o insuficiencia renal(retención hídrica; riesgo incrementado de necrosis avascular en los pacientes bajo diálisis). Hipoalbuminemia (aumenta la fracción libre del fármaco, por lo que debe comenzarse el tratamiento con dosis menores al estándar). Insuficiencia hepática (riesgo aumentado de toxicidad del fármaco, especialmente si existe hipoalbuminemia). Glaucoma de ángulo abierto(puede incrementar la presión intraocular). Diabetes mellitus (puede ser activada o exacerbada). Osteoporosis(puede agravarse). Hiperlipidemia(puede exacerbarse). Psicosis; trastorno bipolar (aumento del riesgo de descompensación). Si se debe aplicar una inyección intravenosa rápida, deben estar disponibles medidas de reanimación, por el riesgo de arritmias cardíacas, shock anafiláctico o convulsiones. En el momento de suspender un tratamiento prolongado con CORODEX debe preferirse una retirada lenta y gradual para no exponer al paciente a un síndrome de insuficiencia suprarrenal, potencialmente grave, o a un síndrome de abstinencia (dolor abdominal o dorsal; cefaleas, mialgias, artralgias (sin aumento de la velocidad de eritrosedimentación), fatiga, cansancio, debilidad, febrícula, náuseas, vómitos). Si el paciente recibe insulina o hipoglucemiantes orales, debe recordarse que al retirar un medicamento como CORODEX, que podía estar antagonizando el efecto de aquellos, podría producirse hipoglicemia. Si un paciente que recibe CORODEX está o estará expuesto a stress psíquico o físico severo (infecciones importantes, traumatismos, cirugía general o dental, etc.) debería recibir un incremento de la dosis antes, durante y por un tiempo después de dichas situaciones. Los siguientes controles pueden ser necesarios durante el tratamiento con CORODEX: glicemia, glucosuria, tolerancia a la glucosa(en pacientes con diabetes mellitus o predispuestos). Estado nutricional (los corticoides promueven el catabolismo de las proteínas, por lo que puede ser necesario incrementar el aporte de las mismas). Función del eje hipotálamohipófiso-adrenal(sobre todo en tratamientos prolongados, a altas dosis, tanto durante el uso del fármaco como después de retirarlo). Debe recordarse que la recuperación completa del funcionamiento del eje HHA puede demorar hasta un año después de suspenderse un tratamiento prolongado; incluso en algunos pacientes, la recuperación total de la función puede no alcanzarse nunca. Examen oftalmológico periódico(en tratamientos de más de seis semanas, para descartar la presencia de glaucoma, aumento de la presión intraocular, cataratas o infecciones oculares). Detección de sangre en las heces(para descartar sangrado digestivo asintomático). Ionograma(junto con el monitoreo clínico, permite establecer si es necesario restringir la ingesta de sodio, o agregar potasio).

Farmacocinética

Por vía intravenosa e intramuscular, el comienzo de acción es rápido; por vía oral, la absorción es casi total, y el pico de acción se alcanza en 1 a 2 horas después de ingerir el comprimido. Circula mayoritariamente unido a proteínas, siendo su vida media en plasma, de 3 a 4,5 horas, y a nivel tisular, 36 a 54 horas, perteneciendo por lo tanto al grupo de los glucocorticoides de acción prolongada. La biotransformación se cumple primariamente a nivel hepático, y también renal y tisular. Los metabolitos inactivos se excretan por vía renal.

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