Composición
Cada comprimido contiene: ftalilsulfatiazol 200mg, sulfadiazina 150mg, pectina 100mg, excipientes cs. Cada 100ml de suspensión contiene: ftalilsulfatiazol 2g, sulfadiazina 1,5g, pectina 1g, excipientes cs.
Dosificación
Comprimidos: niños mayores y adultos, 1 a 2 comprimidos cada 4 horas, variando la dosis diaria de 6 a 15 comprimidos. Suspensión: lactantes y niños pequeños, 5ml a 10ml por kg de peso en las 24 horas; en niños mayores y adultos, 10ml a 20ml cada 4 horas.
Reacciones Adversas
Pueden ser locales o sistémicas, y dependen de los agentes presentes en el compuesto. El ftalilsulfatiazol puede dar lugar a heces más abundantes y de menor consistencia que lo normal. Este efecto está contrarrestado en TALIPECTIN N, debido a la asociación con pectina que produce el efecto opuesto. Por otra parte, la mejoría clínica de la diarrea infecciosa se agrega al efecto anterior, de modo que la resultante será una tendencia a la normalización de las deposiciones. Otros fenómenos a nivel local que pueden ser debidos tanto al ftalilsulfatiazol como a la sulfadiazina dependen de la alteración de la flora microbiana intestinal, que puede provocar proliferación de gérmenes resistentes, fundamentalmente hongos, o la disminución de producción bacteriana de vitamina K, lo que a su vez puede provocar cuadros hemorragíparos por descenso de la tasa de protrombina. Estos fenómenos son infrecuentes y se ven en general en caso de administración prolongada de sulfas, lo que no sucede con el uso de TALIPECTIN N en las indicaciones terapéuticas recomendables. Las reacciones de orden sistémico pueden ser debidas a la sulfadiazina y excepcionalmente al ftalilsulfatiazol, ya que éste es muy poco absorbido por la mucosa intestinal. Las reacciones secundarias son comunes a todas las sulfamidas y comprenden en su mayoría reacciones de hipersensibilidad: alteraciones hematológicas (agranulocitosis, anemia hemolítica, anemia aplásica, trombocitopenia, eosinofilia); manifestaciones cutáneas y mucosas (exantema, dermatitis); alteraciones hepáticas, cristaluria o lesiones tubulares renales, fiebre medicamentosa. Teniendo en cuenta la amplia difusión del uso de las sulfamidas en general, la posibilidad de tales reacciones puede considerarse rara, sin embargo ellas deben ser tenidas en cuenta. La pectina, por su parte, no tiende a producir ninguna reacción colateral.
Precauciones
Aunque el uso a corto plazo hace infrecuente la aparición de reacciones adversas, su posibilidad indica la vigilancia de la sintomatología del paciente. No se aconseja su administración en el preparto por la posibilidad de pasaje a través de la placenta y agresión al neonato.