PARSIDOL

Acción Terapéutica: Antiparkinsonianos

Cada comprimido contiene: clorhidrato de profenamina 50mg.

Estuche con 50 comp. en bíster.

Está indicado en el tratamiento de los síndromes parkinsonianos (temblor, rigidez, enlentecimiento motor) tanto idiopáticos (enfermedad de Parkinson) como secundarios a etiologías determinadas (parkinsonismo posencefalítico, vascular o tóxico). En todos estos casos puede ser usado como agente terapéutico único, y también, en los casos más severos, como coadyuvante de drogas más potentes, del tipo de la levodopa. Tiene un lugar fundamental en la terapéutica correctiva de algunos síndromes extrapiramidales producidos por otros medicamentos, particularmente cuando estos no pueden retirarse, como es el caso de la patología psiquiátrica mayor, aguda y crónica, que debe ser tratada con neurolépticos. Estos síndromes motores comprenden: parkinsonismo(el más frecuente). Se instala progresivamente a lo largo de las primeras semanas de tratamiento neuroléptico. Debe tratarse cuando repercute negativamente en la calidad de vida del paciente, o cuando constituye una causa de rechazo a los antipsicóticos. Distonía aguda.Puede afectar cualquier grupo muscular, pero predomina en el raquis y en los oculomotores. Se instala en general durante las primeras horas del tratamiento neuroléptico, o tras un aumento de dosis, y constituye para el paciente una experiencia muy dramática. Esto lleva a que en algunos casos (especialmente en los jóvenes, que tienen mayor riesgo de padecerla) se utilice PARSIDOL profilácticamente, desde la primera dosis de neuroléptico. Ante una distonía instalada, comenzar con PARSIDOL, y eventualmente reforzarlo con anticolinérgicos parenterales y/o potenciarlo con antihistamínicos o benzodiazepinas. Acatisia.Tiene un componente subjetivo (ansiedad) y otro objetivo (gran inquietud motriz), por lo cual puede confundirse con una agravación psicótica y generar un inapropiado aumento de neuroléptico. PARSIDOL puede usarse pues como prueba terapéutica, eventualmente potenciado con antihistamínicos o benzodiazepinas. No tiene utilidad para tratar la discinesia tardía.

La dosis usual es de 1 a 4 comprimidos diarios. Puede aumentarse gradualmente hasta 12 comprimidos por día, especialmente en los parkinsonismos farmacológicos. La dosis diaria debe dividirse en 2 a 4 tomas. Estas deben realizarse junto con las comidas. Si se olvida una dosis, debe tomarse tan pronto como sea posible, si aún faltan más de dos horas para la próxima. De lo contrario, omitir la dosis salteada y adelantar la siguiente.

Está contraindicado en pacientes con hipersensibilidad al fármaco o con discinesia tardía, a la que empeora.

Estas derivan fundamentalmente de sus efectos anticolinérgicos: visión borrosa, dificultad para orinar, estreñimiento, palpitaciones, disminución de la sudoración y sequedad de las mucosas. Puede producir somnolencia, torpeza motriz o, más raramente, confusión y alucinaciones.

Debe usarse con precaución en todas aquellas situaciones clínicas susceptibles de agravarse por sus acciones anticolinérgicas: arritmias o inestabilidad cardíacas, glaucoma, oclusión intestinal (presente o en riesgo), retención urinaria o prostatismo, miastenia gravis. Se dosificará con precaución en los casos de insuficiencia renal o hepática. Idem en ancianos, por el riesgo de confusión mental o problemas de memoria. No hay evidencia clínica de teratogénesis en humanos, pero no se han realizado estudios específicos. Se desconoce si pasa a la leche materna. No hay información sobre el uso en niños. Hasta no determinar fehacientemente en cada paciente que no produce alteraciones de la atención y los reflejos, no debe autorizarse la conducción de vehículos o maquinarias peligrosas. Debe evitarse la ingestión de bebidas alcohólicas.